Si hay una fecha en la que Madrid saca pecho de sus tradiciones, se viste con sus mejores galas y se echa a la calle a pasarlo bien, esa es el 15 de mayo, día de San Isidro Labrador, el patrón de la ciudad. Y no hablamos solo de una fiesta religiosa: esto es todo un fiestón madrileño, con música, baile, comida rica y un ambientazo que no te puedes perder.

¿Quién fue San Isidro?
San Isidro no era ningún noble ni guerrero. Era un campesino sencillo que vivió en el siglo XII y al que se le atribuyen un montón de milagros, casi todos relacionados con el agua (como abrir manantiales con una azada o hacer brotar fuentes donde no había nada). Se hizo tan famoso que en 1622 lo canonizaron, y desde entonces los madrileños lo tienen como su protector. Vamos, que el hombre se ha ganado su hueco en el calendario… ¡y en el corazón de todos!
¿Dónde se celebra la gran fiesta?
El epicentro de la celebración está en la Pradera de San Isidro, un parque enorme en el barrio de Carabanchel. Allí, miles de personas se juntan para pasar el día al aire libre: meriendas en la hierba, música en directo, bailes, puestos de feria y hasta agua “milagrosa” que brota de una fuente junto a la ermita del santo. Algunos van por fe… y otros por la fiesta. Pero lo cierto es que nadie se aburre.


¡Todos de chulapos y chulapas!
Uno de los grandes atractivos de esta fiesta es ver a la gente vestida con los trajes tradicionales madrileños. Los hombres se ponen su gorra “parpusa”, chaleco y clavel en la solapa. Las mujeres, con vestidos ajustados de lunares, mantón de Manila y claveles en el pelo, van guapísimas. Y no es solo para hacerse la foto: se lanzan al chotis como si no hubiera un mañana.
El chotis es el baile típico de Madrid, y aunque parezca sencillo, tiene su truco: él da vueltas como un tiovivo mientras ella se mueve con gracia a su alrededor. Todo esto, por supuesto, con música de organillo sonando de fondo.
La fiesta se extiende por todo Madrid
Aunque la pradera sea el alma del sarao, la fiesta no se queda allí. Las Vistillas, la Plaza Mayor, Lavapiés y muchos otros rincones de Madrid se llenan de verbenas, conciertos, mercados, pasacalles y espectáculos para peques y mayores. Es la ocasión perfecta para ver a Madrid en su versión más auténtica y divertida.
Además, por la noche hay fuegos artificiales, orquestas y hasta algún que otro DJ que se cuela para mezclar lo castizo con lo moderno. Vamos, que hay fiesta para todos los gustos.
¿Y de comer? ¡Un festín castizo!
Si vas a San Isidro, ve con hambre, porque la comida típica no se queda corta. Lo más famoso son las rosquillas del santo: las tontas (sin nada), las listas (con glaseado de azúcar) y las de Santa Clara (cubiertas con merengue). Y si te atreves con sabores más cañís, prueba las gallinejas y entresijos, que son vísceras fritas y todo un clásico madrileño (aunque no apto para delicados).
También abundan los barquillos, bocatas de calamares, y la limonada al estilo castizo, con vino, fruta y mucho arte.
En resumen…
San Isidro es más que una fiesta: es una explosión de alegría, color, tradición y buen rollo. Una ocasión única para ver a Madrid con alma de pueblo, bailando chotis, comiendo rosquillas y celebrando como solo los madrileños saben hacer. Así que ya sabes: ponte el clavel, afina el chotis, y vente a disfrutar de la fiesta más castiza del año.
¡Viva San Isidro y que no falte la limonada! 🍋🎶💃🕺🌸
2 respuestas a «¡San Isidro! La fiesta más castiza de Madrid»
Tengo muchos celos porque un amigo mío y su esposa pasaron la semana en Madrid y acaban de subir sus fotos en Facebook. ¡Lo pasaron fenomenal y las fotos me dan ganas de volver a Madrid!
Muy buenas Jonathan 🙂
Yo estuve ayer en la pradera de San Isidro y flipa… ¡Hasta arriba de gente! No cabía un alfiler. Y eso que diluvió un rato pero dio igual porque después salió el sol y salieron todos los gatos madrileños a celebrar jajaja.
Ojalá hubieras estado en Madrid por estas fechas para enseñarte lo más castizo de la ciudad jejejeje.
Un abrazo grande.
Manu.